La Plaza Roja en Moscú, Rusia

Introducción

Es el lugar más emblemático de Moscú y quizás, de Rusia. Con todo lo que representa para la historia mundial, este lugar fue uno de los que más me emocionó conocer.

En este espacio se llevaban a cabo grandes desfiles militares de la Unión Soviética durante la guerra fría, esos desfiles que quizás, muchas veces viste en los documentales de historia.

Los edificios que rodean a la plaza son tan ricos simbólicamente, con tanta historia y cultura, que uno no puede dejar de girar la cabeza todo el tiempo en busca de nuevos símbolos.

La catedral de San Basilio

Con su arquitectura tan particular e inconfundible, Ivan el terrible mandó a construirla en 1554 para celebrar la conquista del Kanato de Kazan.

La construcción fue finalizada en 1561. La catedral está compuesta por nueve capillas diferentes, en honor a cada uno de los santos en cuyas festividades el Zar ganó una batalla.

Cuenta la leyenda que Ivan quedó tan asombrado con lo bello del resultado, que mandó a dejar ciego a su constructor, Póstnik Yákovlev, con el fin de que éste no pudiese volver a construir nada igual.

El nombre original es Catedral del Manto de la Virgen.

La denominación de Catedral de San Basilio surge luego de la muerte de Basilio el bendito, un personaje de la ciudad que según se creía, podía realizar milagros.

Según se dice, Basilio era la única persona a la que Iván el terrible le temía, por lo que cuando fallece lo manda a enterrar en la Iglesia de la Santa Trinidad.

Luego, en el año 1588, el zar Fiodor Ivanovich trasladó sus restos a la Catedral del Manto de la Virgen, y sobre su tumba levantó una nueva capilla. Desde allí comenzó a ser nombrada como Catedral de San Basilio.

El mausoleo de Lenin

Aquí se conservan los restos del líder de la revolución Bolchevique, suceso que cambió el rumbo de la historia mundial.

Vladimir Lenin fue uno de los pensadores que mejor entendió y llevó a cabo el concepto de “revolución social”. Gobernó durante la guerra civil y murió en 1924, su muerte aún guarda mucho misterio.

Luego de fallecer Lenin y, a pesar de que su voluntad era que lo entierraran junto a su madre en San Petersburgo, su sucesor, Stalin, se encargó de embalsamarlo y colocarlo  en el mausoleo como símbolo histórico de la URSS.

Allí descansa su cuerpo bajo tratamientos especiales para su preservación. La entrada al mausoleo es gratuita y por lo general en nuestra estadía había una larga fila desde temprano para poder ingresar.

Nosotros no ingresamos a ver el cuerpo del gran líder socialista por varios motivos, pero el principal y el que más influyó en nuestra decisión fue una charla que tuvimos con un ciudadano ruso, que nos comentó lo mal que él veía que no dejaran descansar en paz al cuerpo de Lenin, eso hizo un clic en nuestra cabeza. Aun así, considero que es una decisión personal que cada uno debe asumir. 

El Gum

Es uno de los centros comerciales más elegantes de Rusia, fue construido en 1893. Luego de la revolución, el edificio comenzó a funcionar como sede de oficinas gubernamentales, volviendo a ser un centro comercial en el año 1953, cuando la URSS lo reconstruyó nuevamente.

Su arquitectura es hermosa y está rodeado por jardines muy coloridos en verano. De noche, se ilumina con luces que resaltan sus innumerables detalles.

Leí por ahí que en este edificio se realizó el funeral de Nadezhda Allilúyeva, la joven esposa de Stalin que se quitó la vida en 1932.

El museo estatal de historia

En 1872 fue impulsado por la  Sociedad Científica de Rusia. Deseaban construir un depósito que contuviera los más importantes documentos históricos del país.

El museo se construyó entre 1875 y 1881. Está construido con ladrillos rojos similar al Kremlin. Gigante, imponente, precioso… todos los adjetivos de esplendor que se te ocurran aplican a este edificio.

¿En cuánto tiempo se puede recorrer la Plaza Roja?

Recomiendo un día entero. Si deseas, puedes realizar visitas guiadas de los lugares sobre los cuales te conté  y conocer también los alrededores, donde hay más maravillas históricas por conocer, como las propias murallas del Kremlin y la tumba del soldado desconocido, entre otras cosas.

Personalmente, no me bastó un solo día y regresé varios días más, de mañana, de tarde, también por la noche, que es el momento cuando menos turistas asisten.

Caminé, me senté, recordé algunas cosas que había leído, algunas películas que había visto. Sin dudas, Moscú es uno de los lugares más lindos que he tenido la posibilidad de conocer.

Escrito por:

Javier